Miércoles 22 de diciembre de 2010
Sí, la fecha la escribimos completa. No olvidar fue la consigna que nos enseñó Néstor. Él, que sabía de qué se trataba el hecho simbólico de que los genocidas de nuestro país murieran en la cárcel común por haber cometido delitos de lesa humanidad, se fue sin saber que en nuestro país la justicia existe.
Y decimos “hecho simbólico” para que también tengamos en cuenta que la cadena perpetua y la cárcel común llegaron exactamente 34 años y 9 nueves después desde que ocurrió el golpe de Estado del 24 de marzo de 1976, de la mano de R. V. y L. M.
Ambos represores fueron juzgados (junto con otros 28) por los asesinatos cometidos en la Unidad Penitenciaria Nº 1 del barrio de San Martín, en la jurisdicción del III Cuerpo del Ejército entre abril y septiembre de 1976.
Considerando la apertura de nuevos juicios a represores, los nuevos testimonios de víctimas directas o familiares de las mismas y la importancia de la cantidad de nietos/as recuperados desde el año 2003 en adelante, es que vale aclarar que todo ello fue una decisión política de un Gobierno democrático que nunca antes había ocurrido.
Lo de hoy es una buena manera de terminar un año que nos colmó de inmensas alegrías y tristezas a la vez. Cómo olvidar los festejos populares del 25 de mayo. Cómo olvidar el 27 de octubre, ¿cómo?
No hay manera y por eso no lo olvidaremos.
Por la memoria de Néstor Kirchner y porque nuestra Presidenta nos necesita es que seguiremos reclamando más Memoria, Verdad y Justicia. Por los 30.000. Por todos/as.
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